La visita que recomendamos en la zona de S’Illeta consiste en un agradable paseo con algunos pequeños desniveles, que combina grandes atractivos patrimoniales y paisajísticos. Entre los primeros se ha de destacar la robusta torre Picada, la costa de Ses Puntes y el camino de S’Illeta.

Un buen punto para iniciar este paseo es la última estación del tranvía en el Port de Sóller. Cuando bajamos del vagón debemos retroceder varios metros el mismo trayecto que acabamos de realizar con el tranvía. De modo que vamos caminando por el paseo Des Través paralelamente a las vías del tranvía hasta pasar por un parque, donde llaman la atención diferentes esculturas de arte hechas por la gente del lugar.

Continuamos paralelamente a las vías unos 120 metros más, hasta girar a nuestra izquierda y recorrer la calle Antoni Montis. Al finalizar esta calle vemos una rotonda. Debemos continuar nuestro camino tomando la calle de la izquierda y recorriendo la Avenida Onze de Maig. Después de esta calle nos encontramos con una plaza; hay que continuar recto por la calle de enfrente, carrer de Bèlgica,que asciende con una fuerte pendiente. Subimos esta cuesta hasta llegar a una pronunciada curva que gira a la izquierda. En este punto debemos tomar el camino de S’Illeta, que queda a nuestra derecha y que continúa recto. Pasamos un murete y el camino, mucho más estrecho y también asfaltado, continúa con una gran pendiente serpenteando entre los olivares. A nuestra izquierda queda la casa Des Figueral Vell, que antiguamente tenía una almazara, y, dos curvas más arriba, llegamos al Coll de S’Illa, donde tras el portillo confluyen diversos caminos.

Para visitar la torre Picada nos interesa el camino de carros que aparece, muy pronunciado, a nuestra izquierda. Este camino goza de panorámicas interesantes de la Costa de S’Illeta. Describe una pronunciada curva a la izquierda y alcanza un llano de olivares donde tenemos que tomar el camino de la derecha que nos llevará hasta la torre Picada.

Para volver al Coll de S’Illa, dirigimos nuestros pasos por el mismo camino hasta llegar al llano mencionado donde, a nuestra derecha, se observan las trazas del antiguo camino que nos conducirá hasta el Coll. Nuestro próximo objetivo será visitar la zona de Ses Puntes. Situados en el Coll de S’illa es preciso seguir el camino –convertido ahora en pista- que queda justo enfrente, y que inmediatamente inicia un persistente descenso en busca del mar. Al inicio pasamos por varios olivares abandonados, pero más abajo entramos en una zona de umbríos encinares. Justo después de un horno de cal, la pista se desvía hacia la derecha y el antiguo camino continúa el descenso hacia el mar. Una vez llegados al mar, diversos senderos nos facilitan la vista a lugares como Ses Cambres (a la derecha), Sa Punta Llarga o Sa Punta Curta.

La vuelta la hacemos por el mismo camino hasta llegar al Coll de S’Illa, donde tomamos a la izquierda una carretera asfaltada. Pocos minutos después el asfalto deja paso a un bello camino de carros utilizado para acceder a los olivares y por numerosos excursionistas. Continúa la carretera, ya mucho más llana, hasta la entrada de la propiedad de S’Illeta, desde donde es posible continuar para realizar diversas excursiones que llevan al paso S’Heur, a la vuelta al Puig de Bàlitx, al paso de Na Cordellina o a la fuente de Es Joncar, entre otros recorridos. Sin embargo, nuestra ruta finaliza en el muro de esta propiedad, volviendo al Port de Sóller por el camino de S’Illeta.

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